NO HABLO SI NO TENGO NADA QUE DECIR.

sábado, noviembre 12, 2005

Muerte en una nube


Vivir en nuestra nube, sea azul o gris, supone no ser realmente conscientes de cómo funciona el mundo.
Tanto las personas que viven en su nube azul, donde todo es perfectamente maravilloso y todo tiene una excepcional lógica romántica, como las que viven en su nube gris, donde nada parece tener coherencia, viven una vida que a cada instante se choca con la realidad.
Por eso, cada segundo que pasa se produce la muerte en una nube cualquiera ya que en ambas siempre existen esperanzas, ilusiones, sentimientos que la extrema brutalidad e individualidad de la sociedad en la nos movemos se ocupa de exterminar, haciéndonos ver que nada es lo que parece y que nada puede volver a ese estado de eterna solidaridad que todos deseamos pero que nadie es capaz de llevar a la práctica.
Vivir con los pies en la tierra parece ser la opción más fácil para evitar la muerte de todas esas cosas que parecen ser las que nos lleven a conseguir la futura felicidad. Pero, ¿hay algún ser humano que pueda soportar vivir constantemente en un mundo donde ya nada importa nada y donde no se puede esperar nada de nadie?